miércoles, 19 de febrero de 2014

UNA INVERSIÓN DE FUTURO


 
¿Cuántas veces hemos dicho aquello de:" la salud es lo primero”?
En los últimos años ha habido un aumento dramático del número de personas que sufren de patologías como diabetes, obesidad, sobrepeso, hipertensión, lumbalgias … y no sólo sucede en edad adulta como sería de esperar ,sino lo que es más dramático, a  edades infantiles se está produciendo un incremento de estos casos; cada vez más, a menor edad aparecen problemas anteriormente asociados al envejecimiento.
El estilo de vida que seguimos actualmente la sociedad; en la que el desarrollo tecnológico es brutal y nos hace más “cómodas” nuestras actividades diarias ha ido en perjuicio de nuestra calidad de vida activa y a priori más “incómoda”. Hasta hace unos cuantos años en que no existían los móviles, tv, el automóvil… y trabajábamos en el campo, íbamos en bicicleta al trabajo… inconscientemente éramos unos verdaderos deportistas, en el sentido de un mayor desarrollo de nuestra resistencia cardiovascular.
Numerosos estudios científicos relacionan inversamente el nivel de resistencia con la probabilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares, locomotoras, óseas… en la edad adulta; o sea, que a mayor nivel de actividad física, mayor calidad de vida (Haskell, William L.,et al 2007),Garber, C. E., et.al (2011).
Hoy día debido a la reducción de la actividad física cotidiana es necesario; y yo diría imprescindible; destinar parte de nuestro tiempo libre a realizar ejercicio físico que compense esa falta de movimiento.
Pero,¿ basta solamente con realizar deporte o ejercicio, sin ningún control o conocimiento?
¿Y si estos problemas pudieran ser evitados o por lo menos  por la práctica adecuada de actividad física?
Yo siempre digo lo mismo: realizar actividad física puede ser muy beneficioso si se realiza de forma correcta; como he dicho anteriormente; o perjudicial si se realiza de forma incorrecta, que puede desencadenar en lesiones, agravamiento de problemas anteriores,   sobreentrenamiento, aburrimiento…
La práctica deportiva dirigida y controlada proporciona innumerables beneficios a nuestra salud y reducirá ampliamente el riesgo de sufrir enfermedades o problemas asociados con el deterioro de nuestra salud en edad avanzada.
Beneficios de la una correcta práctica de actividad física:
-Reducción del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, respiratorias, locomotoras, articulares, óseas… como infartos, obesidad, diabetes, hipertensión, lumbalgias…e incluso  ciertos tipos de cáncer.
-Mantenimiento o incremento de la masa muscular (evitar la sarcopenia ) lo que nos proporcionará una mayor independencia en la edad adulta.
-Aumento de la capacidad cardiorrespiratoria.
-Mejor apariencia física, reducción de masa grasa, mejora del estado de ánimo…
-Mejora del bienestar psicológico.
Crear hábitos de vida saludable lo más pronto posible  es una inversión de futuro ya que ello será la base para que en edad adulta los niños desarrollen un estilo de vida activo y saludable evitando el temido sedentarismo tan en auge actualmente.
 ¿Cuánto cuesta tu salud y bienestar?
Siempre que tenemos una enfermedad o lesión acudimos al médico, cuando necesitamos ayuda psicológica vamos al psicólogo , cuando queremos comprar un ordenador acudimos a un informático, cuando nuestro coche ha sufrido una avería vamos al mecánico…entonces porqué muchas veces cuando queremos mejorar nuestro rendimiento físico no acudimos a un preparador físico o entrenador personal?
No veas a un entrenador personal o preparador físico como un gasto presente sino como una inversión de futuro  para tu salud. Invierte en ti mismo, en tu cuerpo, en tu estado físico y mental.
Hay quien dice que es caro pero luego se gastan más en salir, un cochazo, ropa, relojes, móviles, electrónica, estética…
Nadie cuestiona dejar su coche en manos de un buen mecánico profesional, cuando es necesaria una reparación o puesta a punto; vamos a escatimar más en nuestra salud que en nuestro coche?
Todo depende de cuáles son tus prioridades; para mí: LA SALUD ES LO PRIMERO